Melancolía

Estándar

Me duele tanto la cabeza estos días que no me atrevo a quitarme la coleta por si se me desvanece el cerebro. Tanta congestión…vamos, tanto moco acumulado, me tiene llena de pupas el labio y la nariz, sin el sentido del olfato y sin poder ir a abrazar a mi super prima y sus grapas. Vamos, una alegría, para variar.

Os cuento que esta semana tengo la eco en el pecho para ver si el golpe con el mando ha sido importante, y ando recopilando informes para la revisión de la minusvalía, que ya he ido a informarme y tengo que presentarlos para ponerme de nuevo en lista de espera.

Y esta tarde que estoy sola y empieza a anochecer, me estoy poniendo melancólica. Hace muchos días que lucho por mantenerla a raya, pero a veces me puede, soy humana, y vuelvo atrás.
Sigo buscando a mi estrella cada noche para contarle mis penas, mis preocupaciones, y para decirle una y otra vez que le echo tanto de menos que me duele el alma.
Con mamá me hago la fuerte, en cada abrazo que la doy intento dejarle el consuelo que necesita hasta mi siguiente visita, pero a veces pienso que tanta máscara me va a hacer de piedra, y en el siguiente abrazo me voy a romper.

En días como hoy agradezco pasar un rato a solas, sin tener que ocultar las lágrimas, cogiendo fuerzas para que cuando regresen la sirenita y su hermana pequeña me vuelvan a exprimir y yo me deje abrazar y mimar sin miedo a echarme a llorar en vez de reir a carcajadas.

Venga, arriba, a sonarse y a preparar la vuelta. Voy a intentar dejar algún espacio libre para que me lo vuelvan a descolocar. Gracias por dejarme otra vez vuestro hombro.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Gravatar
Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s