Así está hoy mi saco de inspiración: vacío.
He ido dejando pasar el día para esperar que las musas volvieran, pero deben estar muy a gusto en su destino, porque ni veo su rastro brillante a lo lejos.
Por eso hoy os dejo. Siempre he preferido callar a llenar el vacío de paja.
Feliz fin de semana. Os leo!