Esta semana cambio de papel: ejerzo de enfermera. Y no, no me gusta, ya os he contado alguna vez que prefiero ser la enferma, pero así ha venido y así habrá que atajarla.
Primero visita al oftalmólogo con Berta, no se si la dilatarán pupila o será una simple revisión. Después, a observar la tos de cazallera de Carlota, que madre mía cuánto gallo, esconderemos el alpiste para que no salgan corriendo. Y mañana, quirófano con Jaime para extirpar un par de lunares algo feos.
Así comenzamos la semana: guardería, cole, médico, entreno, más guarde, más cole, más médico…no puedo entender cómo no pierdo los kilos en el camino, si no paro!! Claro, que comiendo como lo hago, necesitaría 3 o 4 hijos más con sus actividades correspondientes para bajarlos.
Poco más para contar, que las noticias últimamente no paran de hablar de disparos y elefantes con la que está cayendo, y que la primavera ha venido fría y con mucho aire…cómo era aquello de marzo ventoso y abril lluvioso? Hasta el refranero está a la baja y comprime los meses, cómo está la cosa!!
Os dejo. Que tengáis un buen comienzo de semana.