Como en un puzzle. Así ando, montando las piezas.
Poco a poco se empieza a ver la forma.
Nos hemos despedido de la escayola, aunque ha dejado huella en forma de rozadura. Contado por el propio personal del hospital, el material que les han comprado es malo. Tanto, que hace heridas. Bendito estado del bienestar.
Mis lolas han pasado hoy la revisión. Están estupendas. Pero hasta dentro de un mes no vuelvo. Entonces entraré de nuevo en lista de espera para que me «fabriquen» un pezón de la nada.
No os lo niego. Estoy tristona. Pensé que iba a ser todo más rápido. Pero el doctor tiene toda la razón: sólo hace un mes.
Me pueden las ganas de terminar por fin con todo. De poder decir con total seguridad que ya ha terminado el proceso.
Empiezo a estar muy cansada. Yo, que tantas veces he presumido de paciencia, me tengo que tragar mis palabras.
Me está costando mantener el estado de ánimo en lo alto, aunque ya sabéis que mis caídas duran poco. Y esta vez seguro que se vuelve a cumplir.
Os dejo ya, esperando que el sol que asoma me caliente y me llene de vitaminas.
Os leo!