Os voy a intentar contar mi visita de hoy al ginecólogo, sin ser demasiado explícita, para que llegueis a imaginaros como son mis rutinarias consultas en el hospital.
En mi caso, primero me paso un buen rato contando novedades: que si mastectomías bilaterales, que si novedades familiares…lo normal, vamos 😉
Tras ese ratito en que la pobre gine no puede parar de escribir, y tras contestar una batería de preguntas, me pasan a la sala de torturas, o a la sala X que muchos soñarían, todo depende de los ojos con los que mires.
Una camilla, otra parecida a un potro con sus estribos y todo y, como siempre, a desnudarse y arriba!! Hoy tocaba citología en medio acuático y tacto. Y digo yo: que buscará, si ahí dentro ya no hay casi nada?
Luego, revisión de cicatrices de la mastectomía, tacto para ver ganglios, y planificación de las siguientes pruebas. En febrero toca analítica y eco.
Y eso es todo.
Si eres de género masculino, lo siento, imagino tu cara de dolor por el relato, y si tu género es femenino, estás obligada a pasar por ello. No es tan desagradable, no es doloroso, pero es tan necesario…vigila tu salud ginecológica, ya veis la cantidad de casos detectados y curados por revisiones rutinarias.
Merece la pena un ratito de «tortura» contra una vida de placeres.
Nov2
Qué bien describes lo que es una visita al ginecòlogo!La verdad es que nos ha tocado ser mujeres ,con lo que eso conlleva,ya nos toca sufrir tanto por las cosas buenas(somos tan histéricas que no disfrutamos al100%de las vivenvias)como por las malas.Ponerse guapa=sufrimiento,dar a luz=sufrimiento,ir al gine=sufrimiento.Pero lo bueno de todo este sufrimiento es que nos ayuda a hacernos fuertes .Asi que chicas no debemos de dejar de ir al ginecòlogo…..
Esta bien eso de recordarnos nuestras visitas al gine. Para mi es una norma a seguir en mi vida y ya llevo muchos años sin saltarmelas y arrastrando de paso a dos » remolononas»(una sobre todo). Yo tb,desde aqui anìmo a todas a no saltarse las revisiones anuales del «gine».A veces una visita a tiempo es un triunfo a la larga. A mis niñas , recordarlas que ya nos va quedando menos para la proxìma.
Tienes toda la razón es un potro de tortura y a ti todavía es un mujer, pero en mi caso es hombre y encima paciente o sea qué ya te puedes imaginar casa vez qué voy, por cierto yo pasare mañana por esa tortura. Menos mal qué mí gine está de buen ver. Un beso